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Podcast / NIKE y el origen del Swoosh

¡Hola, brander! ¿Sabes qué tienen en común Rafa Nadal, la NBA, y una diosa griega; con la pena de muerte, el supremacismo blanco, y un gofre? Pues ve calzándote tus Air Max porque te voy a contar la Historia de la marca Nike y el origen del Swoosh.

Todo comenzó en 1964, cuando un joven que estaba cursando un MBA tuvo una idea audaz durante un viaje a Japón. Phil Knight, que era como se llamaba este muchachito, estaba fascinado por la calidad de los zapatos deportivos japoneses, y vio una oportunidad de importarlos a Estados Unidos. Lo habló con su entrenador de atletismo de la Universidad de Oregón, Bill Bowerman, y fundaron una empresa llamada Blue Ribbon Sports.

El producto que sentó las bases del éxito de la incipiente Nike fueron las zapatillas de running. Bowerman, era un apasionado entrenador y experto en calzado deportivo, y estaba decidido a crear zapatos más ligeros y cómodos para sus atletas. Con esta visión en mente, comenzó a diseñar prototipos. Curiosamente la inspiración llegó en el momento más insospechado y es que tuvo una revelación al ver a su esposa, Bárbara, cocinando gofres con una gofrera. En ese instante Bowerman, pensó en echar caucho líquido en aquella máquina de gofres para crear una suela innovadora con forma de rejilla con tacos. El resultado fue espectacular. Aquella suela resultó ser mucho más ligera que las anteriores, proporcionando amortiguación y una tracción excepcional… y es que en aquella cocina se vivió un momento crucial para la revolución del calzado deportivo de la época.

Zapatillas NIKE y sus famosas suelas de gofre

En 1971, Phil Knight decidió renombrar la empresa, dejando atrás el nombre Blue Ribbon Sports. Inspirado por la diosa griega de la victoria, Niké, bautizó a la empresa con este nombre icónico y pegadizo. Nike era la diosa alada de la victoria, y su imagen se asociaba con el triunfo en la antigua cultura griega. Este naming era toda una declaración de intenciones porque reflejaba la ambición de la empresa de ser líder en su industria y el deseo de inspirar a los atletas a alcanzar la gloria. Lo cierto es que este cambio de nombre marcó un hito en la historia de la compañía y allanó el camino para su ascenso a la cima de la industria deportiva.

Aquel año Knight estaba dando clase de contabilidad en la universidad de Portland. Allí conoció a Carolyn Davidson, una estudiante de diseño gráfico. El empresario quería que su nueva imagen de marca respirase el mismo aire minimalista y funcional de otro gigante del deporte que acababa de rediseñar su logotipo ese mismo año: Adidas. Así que Knight le hizo un encargo muy explícito… pero Carolyn le presentó el mítico «Swoosh» (silbido). La joven diseñadora le emitió una factura de tan solo 35 dólares por su diseño. Lo que no deja de ser paradójico porque el Swoosh se ha convertido en uno de los símbolos más reconocidos en todo el mundo.

El logo de NIKE, diseñado por Carolyn Davidson, ha trascendido por su simpleza y fácil identificación

La cosa es que al empresario no le moló nada el diseño porque esperaba algo más “Adidas”, pero Carolyn le convenció de que era el logotipo perfecto para su marca. Tenía una forma elegante y su curvatura representaba muy bien la velocidad y el movimiento, capturando así la esencia de la marca. Aún así, no estaba muy convencido y llegó a decir: “No estoy enamorado de la marca, pero me tendré que acostumbrar”. Pues ya ves si se acostumbró… ¡¡se acostumbró al éxito!! Porque años más tarde Knight reconoció el trabajazo que había hecho Davidson con el diseño de su marca y la regaló un sobrecito con un anillo de oro y un paquete de acciones de la compañía.

Nike experimentó un crecimiento fenomenal durante los años 70 y 80. Sin embargo, el punto de inflexión real llegó en 1984 cuando firmaron un contrato con un joven y prometedor jugador de baloncesto llamado Michael Jordan. El lanzamiento de la línea de zapatillas Air Jordan se convirtió en un éxito rotundo, y Nike se consolidó como una marca líder en la cultura del deporte y el estilo.

Michael Jordan se convirtió en la imagen de la marca tanto por sus Air Jordan como su conocida pose

Pero no te equivoques, no fue nada fácil. A Michael Jordan le gustaban más las zapatillas de Adidas o Converse, que solía usar en su época de estudiante. Las Nike no le molaban nada, hasta el punto de que las criticó públicamente diciendo que eran unas «zapatillas del diablo» porque prefería una entresuela más baja para sentir mejor el suelo de la pista. Y tuvo la “mala suerte” de que el diseñador de Nike, Peter Moore escuchó aquellas críticas e hizo cambios en las zapatillas. Redujo el tamaño de la entresuela y trazó las líneas maestras de lo que sería el diseño «high top» de las zapatillas de baloncesto, es decir con caña alta para cubrir el tobillo.

Finalmente, en 1985 Nike convenció a Jordan con hechos para que firmara y creara su propia línea de zapatillas. Las Nike Air Jordan 1, incorporaban al diseño de Peter Moore el Swoosh en el lateral y el primer logo de Air Jordan: con un balón de baloncesto y unas alas. Y esto fue solo el comienzo. Como te comentaba antes, no fue un viaje nada fácil. Las Jordan 1 originales combinaban los colores negro y rojo, algo inaceptable por la NBA, que las criticó y prohibió por no tener la base de color blanco. Como oyes. Cositas del supremacismo blanco americano.

Las Air Jordan fueron rechazas por la falta de color blanco en su diseño, dando paso a la campaña de NIKE «Banned!»

Nike aprovechó toda esta situación para lanzar la exitosa campaña «Banned!» (¡Prohibidas!) y reventaron las ventas. Lo que demostró que el dominio del marketing y la publicidad sería también buque insignia de la compañía. De hecho Nike ha sido famosa por sus campañas publicitarias impactantes y motivadoras que han dejado una huella indeleble en el mundo del marketing. Una de las campañas más emblemáticas fue “Just Do It” («Solo hazlo»), lanzada en 1988. Todo surgió con un anuncio creado por la agencia Wieden + Kennedy, en el que un octogenario contaba a cámara sus sensaciones al recorrer 20 km al día. El spot acaba con un fundido a negro y el mítico “Just Do It” escrito en blanco.

Esta frase simple pero poderosa resonó en personas de todas las edades y se convirtió en un lema universal de inspiración y superación personal. Sobre todo en EEUU, porque seguro que no sabes que esta frase está inspirada en las últimas palabras del reo Gary Gilmore, un asesino norteamericano condenado a muerte una década antes de la emisión del spot. El día de su ejecución, uno de los funcionarios encargados de ajusticiarle le preguntó si tenía algo más que decir. Gilmore simplemente dijo “let’s do it” (hagámoslo).

El eslogan de NIKE está inspirado en las últimas palabras de Gary Gilmore, quien dijo «let’s do it» antes de ser ejecutado

Por último quiero contarte que un año antes del «Just Do It» Nike presentó el famoso logo Jumpman, mostrando a Michael Jordan en pleno salto para hacer el mate más famoso de la historia del baloncesto. Creando así otro símbolo para el salón de la fama de la multinacional.

Hablar de Nike es hacerlo de diseño. La compañía siempre ha apostado por los mejores diseñadores de calzado, como es el caso de Tinker Hatfield. Es sabido y notorio que Hatfield se inspiró en la fachada del Centro Pompidou de París para diseñar las míticas Air Max (mis zapas favoritas). Seguro que ahora las Air Max no te parecen tan innovadoras, pero en 1987 se convirtieron en las primeras zapatillas en las que se veía la cámara de aire por fuera.

Como puedes ver, desde sus humildes comienzos hasta su dominio global, Nike se ha convertido en un símbolo de innovación, rendimiento y estilo. Así que, después de escuchar esta marca con historia, espero que te pongas tus Nike, levantes el vuelo y ¡hagas que tus sueños se conviertan en realidad!

Branding Rules!

 

Fuentes:

nike.com
as.com/tikitakas
lavanguardia.com/cribeo
jdsports.es

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